La enfermedad de Peyronie, más conocida como curvatura peneana, afecta al hombre solo durante la erección y provoca dolores, pérdida de ri...
La enfermedad de Peyronie, más conocida como curvatura peneana, afecta al hombre solo durante la erección y provoca dolores, pérdida de rigidez en el pene, dureza y nódulos, lo que complica la práctica de relaciones sexuales. Llega, incluso, a provocar problemas psicológicos tanto en el hombre que sufre esta enfermedad como en su pareja debido a posibles dolores durante el coito y a la dificultad de mantener relaciones sexuales completas, lo que desemboca en insatisfacción y falta de deseo sexual.
Según un estudio publicado en The Journal of Sexual Medicine realizado con 44 parejas heterosexuales, las compañeras sexuales de los hombres con Peyronie están más insatisfechas sexualmente y con un estado de ánimo más bajo que el de parejas de hombres sanos. La enfermedad, explica la investigación, interfirió de forma importante en la actividad sexual de la pareja. Otra investigación publicada en la misma revista en la que participaron más de 800 hombres con curvatura de pene entre 30 y 90 grados, el 70,8% de los varones manifestó tener dificultades para realizar el coito y el 80,4% reconoció que el número de relaciones sexuales mantenidas eran menos frecuentes que antes de que apareciera la curvatura.
La enfermedad de Peyronie consiste en una curva o acortamiento del pene que se produce por una acumulaciĂłn de placas o bultos fibrosos. Afecta a uno de cada diez hombres mayores de 40 años y, sin embargo, a pesar de esta alta incidencia no se trata de una patologĂa demasiado conocida, quizá por la manera de afrontarla de quienes la padecen. Otro trabajo de la misma publicaciĂłn comprobĂł que el 35% de los 200 hombres que participaron en ella subestimaron la curvatura de su pene.
Puede aparecer entre los 20 y los 80 años aunque lo más frecuente es que se detecte alrededor de los 50 años. Se mide en grados y su evoluciĂłn varĂa aunque lo habitual es que sea progresiva. Se desconoce el origen de la curvatura pero hay varios factores que pueden estar implicados, como puede ser la predisposiciĂłn genĂ©tica o haber pasado por cirugĂas o recibido tratamientos relacionados con la experimentaciĂłn de radiaciones por las que pasan los enfermos de cáncer de prĂłstata. Los especialistas la asocian tambiĂ©n con golpes en las relaciones sexuales
Según un estudio publicado en The Journal of Sexual Medicine realizado con 44 parejas heterosexuales, las compañeras sexuales de los hombres con Peyronie están más insatisfechas sexualmente y con un estado de ánimo más bajo que el de parejas de hombres sanos. La enfermedad, explica la investigación, interfirió de forma importante en la actividad sexual de la pareja. Otra investigación publicada en la misma revista en la que participaron más de 800 hombres con curvatura de pene entre 30 y 90 grados, el 70,8% de los varones manifestó tener dificultades para realizar el coito y el 80,4% reconoció que el número de relaciones sexuales mantenidas eran menos frecuentes que antes de que apareciera la curvatura.
La enfermedad de Peyronie consiste en una curva o acortamiento del pene que se produce por una acumulaciĂłn de placas o bultos fibrosos. Afecta a uno de cada diez hombres mayores de 40 años y, sin embargo, a pesar de esta alta incidencia no se trata de una patologĂa demasiado conocida, quizá por la manera de afrontarla de quienes la padecen. Otro trabajo de la misma publicaciĂłn comprobĂł que el 35% de los 200 hombres que participaron en ella subestimaron la curvatura de su pene.
Puede aparecer entre los 20 y los 80 años aunque lo más frecuente es que se detecte alrededor de los 50 años. Se mide en grados y su evoluciĂłn varĂa aunque lo habitual es que sea progresiva. Se desconoce el origen de la curvatura pero hay varios factores que pueden estar implicados, como puede ser la predisposiciĂłn genĂ©tica o haber pasado por cirugĂas o recibido tratamientos relacionados con la experimentaciĂłn de radiaciones por las que pasan los enfermos de cáncer de prĂłstata. Los especialistas la asocian tambiĂ©n con golpes en las relaciones sexuales
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